Panamá es un país de larga historia, complejo y multicultural. Debido a sus rasgos geográficos, fue global antes de la globalización, por haber desempeñado funciones de tránsito entre dos océanos y de intercambio internacional mucho antes de la apertura del Canal en 1914, pues la estrechez del istmo permitía la comunicación por vía fluvial y terrestre. Los artistas participantes en la residencia LARA lo comprobaron al caminar un tramo de la primera vía interoceánica del orbe, el Camino de Cruces, construido en el siglo XVI.

Puerta de todos los mundos, eje primordial del comercio y la circulación marítima mundial, nudo de transporte aéreo y de telecomunicaciones por fibra óptica para el Caribe, América Central y del Sur, emporio financiero y comercial, paraíso para negocios de toda índole, Panamá llega a ser, en un orbe altamente internacionalizado, el lugar por excelencia del tránsito y el movimiento. Lo anterior se basa en el Canal, pero va mucho más allá. Los participantes en LARA tuvieron la oportunidad de recorrerlo parcialmente en una embarcación, y apreciar la reciente ampliación de sus esclusas; quedaron impresionados por la maravilla ingenieril de la vía interoceánica de 77 kilómetros de largo.

La cultura e historia de Panamá corresponden al ámbito del Caribe –y a su papel en los inicios de la Conquista española de América– más que al ámbito histórico y cultural de Mesoamérica, según ocurre con el resto de la América Central. En época colonial esta región constituía la Capitanía General de Guatemala, a la que Panamá no perteneció. Panamá la Vieja, la capital europea más antigua en tierra firme americana, fue construida por los españoles en la costa del Pacífico en 1519 y destruida en 1671 por el pirata Henry Morgan. La actual Panamá, fundada en 1673 un poco más al oeste, alberga las ruinas de la ciudad antigua. Su centro histórico, recorrido por los artistas, fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO, y es el más importante entre las capitales centroamericanas. Conserva secciones de la muralla, la catedral, una antigua fortaleza, numerosas iglesias, conventos, y plazas coloniales españolas. También las casas de madera de fines del siglo XIX y principios del XX, típicas de las Antillas Menores y testimonio de la época de la construcción de los canales francés y norteamericano. El casco histórico es hoy una zona de intensa vida nocturna.

Con un clima de selva tropical, Panamá es el país con mayor biodiversidad del mundo. Lo muestra el Biomuseo, alojado en un bello edificio construido por Frank Gehry, que también fue visitado por los artistas. Con este rasgo contrasta la proliferación de rascacielos en la capital, una de las ciudades más altas del mundo en proporción al número de habitantes (dos millones, la mitad de la población del país). En Panamá se puede ir en minutos del centro urbano a la jungla, y allí llegar hasta una aldea donde los emberá –uno de los cuatro grupos aborígenes que rigen sus propias comunidades autónomas– viven en condiciones tribales.

La expansión de nuevos edificios, centros comerciales e infraestructuras de comunicación es signo de una de las economías con mejores índices en América Latina, que contrastan con la pobreza y la desigualdad social que los artistas pudieron palpar a las claras en el barrio El Chorrillo, en la ciudad de Panamá, y el arruinado centro de Colón, en la costa del Caribe, donde los artistas también visitaron el Fuerte de San Lorenzo, levantado en el siglo XVII en la desembocadura del río Chagres. Con tal fin atravesaron el istmo por carretera.

Por ser un eje de comunicaciones y negocios globales, Panamá ostenta una diversidad cultural y étnica afín a ciudades mucho mayores. Comunidades de hindúes, chinos, árabes, judíos, griegos, japoneses, españoles, franceses, italianos, y los diferentes grupos indígenas locales, mantienen una vida cultural y religiosa apegada a sus costumbres, aunque adaptada a la extraña modernidad de esta ciudad tropical. Una dinámica de multiplicidad, fragmentación y contrastes ha dado a la capital un carácter muy peculiar. Su delirante modernidad no oculta su incoherencia arquitectónica y urbana. Embotellamientos de tráfico, edificios del pastiche más opulento con fachadas desfiguradas por chorreantes aparatos de aire acondicionado y tuberías, restaurantes de lujo, casinos, quioscos, abarroterías chinas, shopping centers, turistas, personas luciendo sus trajes tradicionales, vendedores ambulantes, templos a todos los dioses, letreros pintados a mano al lado de flamantes pantallas digitales... Fruto de una especulación beneficiada por el lavado de dólares y la venalidad del sistema jurídico, la trama urbana crece en forma discontinua, a la carrera, tragándose aceras y zonas verdes, a pesar de ciertos proyectos públicos recientes que han creado áreas peatonales.

Los artistas se alojaron en un hotel ubicado en un edificio de la ex base militar norteamericana de Albrook, en la antigua Zona del Canal. La Zona fue un enclave militar gobernado por Estados Unidos (un país dentro de otro país) desde la construcción del Canal a inicios del siglo XX, hasta su total devolución a Panamá en 2000. Comprendía el Canal y un área de 8,1 km a cada uno de sus lados, con una extensión total de 1.432 km². Es un lugar único en el mundo por la armónica relación entre el medio construido y la naturaleza, donde, paradójicamente, se cumplieron los ideales urbanísticos y arquitectónicos de la ciudad jardín en bases militares. La llamada arquitectura canalera es además ejemplo de funcionalidad en respuesta a un contexto tropical. El alojamiento en Albrook permitió a los artistas conocer y disfrutar de la belleza y la historia de este ámbito tan singular.

La residencia LARA en Panamá se caracterizó por la intensa y muy positiva convivencia e intercambio entre los artistas. Se organizaron sesiones donde cada uno presentó su obra, que fue discutida por todos. Se desarrolló un intenso programa de visitas a lugares de interés y encuentros con artistas locales, arquitectos y expertos en varios campos. El programa buscó dar a conocer la complejidad de un país a menudo encasillado en clichés.

El archipiélago de Galápagos ubicado a 972 km de la costa ecuatoriana, esta compuesto por 13 islas grandes, 6 pequeñas, 47 islotes y muchas rocas, cubriendo un área total de 8.000 km2. Estas islas, declaradas Parque Nacional en 1959 y “Patrimonio Natural de la Humanidad” en 1979, son conocidas mundialmente por sus numerosas especies endémicas y por ser el segundo archipiélago con mayor actividad volcánica del mundo. Las llamadas “Islas Encantadas” ganaron notoriedad además por estar ligadas a los estudios de Charles Darwin, claves en su desarrollo de la teoría de la evolución. 

Se estima que su formación inicio hace más de 5 millones de años, emergiendo de la superficie del océano debido a erupciones volcánicas. La vida salvaje de las islas esta compuesta principalmente por aves, mamíferos y reptiles. Hoy en día es uno de los destinos más cotizados de buceo del mundo debido a su riqueza en vida marina. Las islas Galápagos conforman el archipiélago más diverso y complejo del mundo en el que las condiciones de vida permanecen relativamente intactas. Sin duda se trata de un lugar muy especial que provee una experiencia fascinante con la naturaleza. 

La residencia de LARA se dividirá en dos islas, Santa Cruz e Isabela, con la posibilidad de visitar otras. En la primera se programarán visitas a lugares como Bahía de Tortuga y los senderos naturales llenos de vegetación que conducen al lugar, los cráteres llamados Gemelos con su diversidad de aves terrestres y por la estación científica Darwin. En la isla Isabela se harán recorridos por el Volcán Sierra Negra, el segundo cráter más grande del mundo con 11 km de diámetro, La Concha y los Túneles, un área muy grande al oeste de Puerto Villamil donde la lava formó muchos arcos en el océano, y que es habitado por manta rayas, tortugas, tiburones, pingüinos, piqueros patas azules y caballos de mar. Se visitará además lugares propios del paisaje cultural del lugar como el Muro de Lágrimas, construido por los presos entre 1949-56 cuando Isabela era una colonia penal. Todos los días los artistas mantendrán interacciones con científicos, guías turísticos, colonos y diversos personajes que darán cuenta no solo de las bondades de este laboratorio natural sino de su historia y los factores de riesgo que las amenazan. 

The town of Honda, originally called Villa de San Bartolomé, was founded in 1539 by Francisco Núñez Pedroso, one year after Santa Fe de Bogotá -the city which would become the capital of Colombia. The site was discovered by Gonzalo Jiménez de Quesada (who founded Bogotá), Sebastián de Belalcázar (who founded Cali, and Quito in Ecuador) and Nicolás de Federman. After the long voyage across the Caribbean, the Spanish ships arrived in Cartagena and took the Magdalena River upstream to infiltrate the rest of the country. The river was navigable only to a point where rapids made it impossible for large ships to pass; so, they were forced to disembark and transfer the goods and passengers to lighter vessels upstream.

Honda was founded on what was a trading post of the Ondaimas tribe, hence its name. The Spaniards created a river outpost, which became the main river port of the Nueva Granada. During the 16th and 17th centuries, Honda became the central point for the transit of people and products that came from Cartagena to the interior of the country, and for the goods that were sent back to Spain. During the early 18th century, Honda evolved to become the third most important city in the Nueva Granada, after Santa Fe and Cartagena de Indias. However, navigation on the river slowly declined, as more efficient transportation systems were developed.

During the 18th century, the British built a railroad network which eventually replaced the river as the main means of moving cargo. Later, the national road network was built (during the 20th century), and other parts of the region were served by these transport networks. The railroad in Honda was eventually abandoned (as was also the case in the rest of the country) and the commercial industry of Honda started to suffer. The Bavaria brewery, one of the largest industries in Honda that provided an large number of jobs for the locals, closed twenty years ago - a huge blow to the local economy. The city experienced a decline in its economy and population, and has not recovered since. The city has currently approximately 35,000 inhabitants. The main items of its economy are small industries, fishing, cattle and commerce, and more recently, tourism.

Activities while in Honda

The artists will be staying in three houses in the neighbourhood of Altos del Rosario: Casa Deuxsoleils, Casa Macías and Casa Senior. Each house has been renovated within the last five years, and will provide a safe and tranquil environment for artists to read, write, and research. Among the activities that can be done while in residence are:

Alto de la Cruz

In front of the Rosario neighbourhood, where the three houses are situated, there is a mountain with an apex called La Cruz. There is a path to climb it, starting from the Navarro Bridge, which takes between 30 minutes and an hour. It is an interesting walk, and the summit provides a complete view of the city and the meanders of the Magdalena River.

Puente Navarro

The artists can also visit the museums and the local archives.

Market

Visiting the plaza de mercado is a great way to get to know the local people, and to try the regional products. It is also a great place to buy materials for certain types of works.

Medina waterfalls

A 20-minute drive, this is a small park with a series of waterfalls.

Quebrada Seca

Only ten minutes from the centre, the walk on the margins of this stream, which is almost dry (hence the name), is a good way to get to know the local vegetation and geography

Mariquita

Only 17 kilometers from Honda, Mariquita (ladybug) is a bustling town which was also important during colonial times. It is worth visiting the Casa de la Real Expedición Botánica, where José Celestino Mutis worked classifying the flora of the country.

Armero

In 1985, the entire city of Armero and its 25,000 inhabitants was swept away overnight by a landslide caused by the Ruiz volcano. The site is now a mass grave without corpses, a camposanto. Few things remain, among them the ruins of some houses that were spared. It is a very moving site, which tells the story of a natural disaster whose fatal consequences could have been avoided.

La residencia tendrá lugar en Oaxaca, una región con un gran patrimonio cultural que ha sido enriquecido por el legado de las culturas prehispánicas de los pueblos zapoteca y mixteca, ejemplos complejos de sincretismo colonial, así como por las costumbres y tradiciones de los diversos grupos étnicos y lingüísticos actuales. La región de Oaxaca ha jugado un papel importante en diversos movimientos políticos y sociales desde el siglo XIX y un papel central en la lucha de los grupos indígenas que se encuentran en un estado permanente de negociación con las exigencias de la modernidad. A pesar de ser una de las regiones de mayor diversidad ecológica en el país y con uno de los legados culturales más ricos, también es uno de los estados más pobres de México, con un desarrollo impedido por la marginación de la población indígena y una cultura política de clientelismo y corrupción. El Arte y la cultura han desempeñado un papel importante para hacer frente y responder a las necesidades sociales y políticas, en particular a través de figuras como Rufino Tamayo, Rodolfo Nieto, Francisco Toledo y Sergio Hernández. Las nuevas generaciones de artistas han tenido que negociar su posición  entre la importancia local de la Escuela de Oaxaca y las nuevas perspectivas disponibles a través de la escena artística internacional interesada en la resonancia mundial de los conflictos locales.

La residencia se llevará a cabo en el Centro de las Artes de San Agustín (CaSa), un espacio comprometido con la educación, la producción y la experimentación artística. Situado en San Agustín Etla, 17 km al norte del centro de Oaxaca, abrió sus puertas en 2006 en el edificio renovado que anteriormente fuera la sede de la fábrica textil La Soledad, construida a fines del silo XIX. Una iniciativa de Francisco Toledo, con el apoyo del gobierno local y federal, así como de fundaciones privadas, el CaSa incluye talleres totalmente equipados para la impresión tradicional y digital, el diseño textil y de tinte. El lugar cuenta además con un laboratorio ecológico para la fotografía analógica, entre otras instalaciones. A través de un programa anual de talleres, residencias creativas, y programas académicos, el CaSa recibe artistas, músicos, escritores, bailarines, arquitectos, cineastas y académicos diversos.

Ollantaytambo, capital del distrito de Ollantaytambo, es un poblado y sitio arqueológico incaico ubicado en el departamento de Cusco, al sur del Perú. Abarca una superficie de 645,25 km2 y cuenta con una población que supera los 11,000 habitantes, de los cuales solo 4000 viven en el pueblo de Ollantaytambo.

Se cree que Ollantaytambo constituyó un estratégico centro militar, agrícola y religioso, para administrar y controlar el Valle Sagrado de los Incas. Sus construcciones con altas murallas, torreones de vigilancia y andenes de resistencia hacen suponer que eran de uso militar, a diferencia de los demás lugares arqueológicos del Cusco. Es por esto que Ollantaytambo es considerado y nombrado “Fortaleza”. También es denominado tambo o ciudad – alojamiento, por su estratégica ubicación en el Valle Sagrado de los Incas.

Pero para la lengua quechua Ollantaytambo, proviene de la palabra Ollanta (quien fue un capitán inca), y del término tambo, una derivación española del vocablo quechua tampu; que quiere decir, "ciudad que ofrece alojamiento, comida y consuelo a los viajeros".

Se caracteriza por tener una agricultura comercial de cultivo de maíz, tubérculos andinos y cereales. Cuenta con sistemas pecuarios y tiene como actividad complementaria y expectante el turismo.

Ollantaytambo está dividida en dos partes por el río Patacancha:

Qosqo Ayllu, que es una zona del pueblo que conserva la antigua configuración urbanística inca (sus calles son delgadas y se abren en dirección al río Urubamba), donde se destacan las calles, canchas, plazas y murallas. El pueblo está acompañado en gran parte de sus calles por maravillosas canaletes de agua de la época.

Araqama Ayllu, esta zona se ubica al sur oeste del pueblo y fue el centro político, administrativo y religioso de Ollantaytambo. En esta zona solo habitaba la nobleza de Ollantaytambo. Ahí se encuentra el Templo del Sol, la Inca Huatanta, una centro ceremonial dedicado al culto del agua, Andenes de resistencia militar, etc.

Ollantaytambo cuenta con innumerables atractivos entre los que destacan:

La Casa Real del Sol , una fortaleza que está conformada por diecisiete terrazas superpuestas, construidas sobre grandes piedras, que llegan a medir más de cuatro metros de alto por dos de ancho y dos de espesor.

La Inca Huatana, consta de una pared con nichos altos, en cuyos lados hay orificios de seguridad de hasta 80 cm. de profundidad. Se cree que fue utilizada para la tortura y ejecución de prisioneros.

El Centro Pincuylluna Pincuylluna, que está ubicado al oeste del río Patucancha, frente al Templo del Sol y cuenta con los depósitos agrícolas llamados colcas, los más interesantes del Valle Sagrado. El Valle Sagrado cuenta con un área comprendida principalmente entre los pueblos de Písac y Ollantaytambo, al noroeste de Cusco. Cuenta con la mayor concentración de sitios arqueológicos del Perú, hay más de 350 lugares, entre edificaciones incaicas tales como: templos, fortalezas, palacios, centros religiosos, andenería, centros urbanos, y sistemas de acueductos

Se caracteriza por tener un excelente clima y tierras muy fértiles. Comprende los pueblos de Písac, Calca, Yucay, Urubamba y Ollantaytambo. Muchos incluyen a los poblados de Chincheros y Machu Picchu como parte del Valle Sagrado.

Algunos poblados aledaños:

Písac, un pueblo ubicado a 32 km. al sureste de Cusco. Este cuenta con el Parque Arqueológico de Písac, con un templo donde se halla un calendario solar o “Intihuatana”, y el cementerio incaico.

Urubamba, ubicado en el corazón del Valle Sagrado, en las faldas del majestuoso nevado Chicón. Fue uno de los principales centros agrícolas del imperio inca.

Chinchero, un pueblo a 28 km. de Cusco. Tiene una plaza principal que se caracteriza por estar al pie de una muralla incaica. En ella se realiza cada domingo el típico mercado donde acuden las comunidades aledañas.

Machu Picchu

El Santuario Histórico de Machu Picchu se encuentra ubicado al noroeste de Cusco, a 129 km. sobre el río Urubamba y en las montañas de Vilcabamba.

Fue probablemente construida en el siglo XV y es la máxima obra conocida de la cultura inca. Se calcula que fue habitada por unas 10 mil personas.

La ciudadela inca se tiene diversos atractivos arquitectónicos como el templo de las "Tres Ventanas", el "Templo Sagrado", la "Mansión Sacerdotal" y el "Intihuatana", un observatorio solar donde se medían las estaciones del año.

Al frente de Machu Picchu se encuentra la increíble montaña de Wayna Picchu (“montaña joven”) desde cuya cima se puede observar a plenitud la ciudadela.

Machu Picchu fue dada a conocer al mundo el 24 de Julio de 1911 por Hiram Bingham, antropólogo norteamericano de la Universidad de Yale.

La Ciudad del Cusco

Fue la capital del imperio Quechua. Es considerada el ombligo del mundo y fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1983 por la Unesco. Fue seleccionada como capital del imperio Quechua por su perfecta ubicación. En esta ciudad es donde vivía el Inca y la mayor concentración de nobleza. Fue la zona más destruida por los españoles en su conquista y tiene una gran concentración de Iglesias Católicas. En ella también se encuentran restos de la arquitectura Quechua como La Plaza de Armas, Sacsayhuamán, la piedra de los doce ángulos en la calle Hatum Rumiyuq o el Coricancha, templo astronómico y santuario más importante del imperio sobre el cual los españoles construyeron el famoso Convento de Santo Domingo.